NI,ZU TA BIOK.Ertzainas fusion +

MAUDILI PRIETO

El titular no es gratuito. Tiene lo suyo. La notícia ha saltado hoy a la luz pública.Telefónica ha ganado el concurso convocado por el Departamento de Seguridad del Gobierno vasco para prestar los servicios de telefonía fija, móvil, acceso a internet y transmisión de datos. Vamos, solo falta Telebista.Y la importancia de este cambio es que esta concesión la tenía desde hace años Euskaltel y que había salido a concurso con un presupuesto de licitación de 2,3 millones de euros anuales. La adjudicación que ahora ha recaído en Telefónica ha sido objeto de disputa durante algo más de tres años. El lío inicial proviene con el consejero socialista Rodolfo Ares (como no iban a faltar los socialistas en el show) cuando convocó originalmente este concurso a mediados de 2012. Euskaltel lo recurrió al entender que la oferta de Telefónica vulneraba el pliego de condiciones,lo que llevó a la propia consejería a paralizar el concurso en octubre de ese mismo año. A finales de 2014 el Departamento de Seguridad, con la jeltzale Estefanía Beltrán de Heredia, volvió a rescatarlo. Telefónica presentó la mejor oferta en todos los servicios sometidos a contrato. Pero el problema es más grave. En primer lugar, Lakua regresa a una empresa española sus servicios y más éste que es el más sensible del ejecutivo de Urkullu. Es la Ertzaintza. Pero en la segunda, es el aviso definitivo del fin de Euskaltel. Tras 20 años del invento de Arzalluz de tener una telefonía nacional, ésta ha sufrido varios varapalos en los últimos tiempos tras su salida a Bolsa. Crisis interna por las stock-options, la pérdida del fútbol en la Telebista, la compra de la gallega R y, finalmente,  éste golpe que ha dejado a Euskaltel herida de muerte en futuro. Pero esto se avisó en 2010. El presidente de Telefónica pronunció unas palabras en una conferencia en Bilbao que resultaron premonitorias. Ante un auditorio plagado de directivos y responsables institucionales, César Alierta fue cuestionado sobre la posibilidad de que su compañía fuese contratada por Eusko Jaurlaritza, que hasta ese momento tan sólo tenía como proveedor a Euskaltel. "Eso -dijo en tono irónico- caerá como las balas en la mili. Por la fuerza de la gravedad y por su propio peso». Y la reina del Fusión fue aniquilando contratos a Euskaltel, desde áreas de gobierno pasando por la EHU. Llegar al armamento del "ejército vasco" (ahora que se quiere recordar al Batallón Gernika por su lucha en la II Guerra Mundial) convierte a los ertzainas en "Fusion" y a Euskaltel en carne de cañón para ser absorbida.