Blogia
orain

NI,ZU TA BIOK.Agur a las tertulias con Txiki

IÑAKI ANASAGASTI
Se nos fue Txiki Benegas. La última vez que me comuniqué con él contestaba a mi pregunta sobre si se iba a incorporar a las tertulias de los lunes en la SER diciéndome que en breve cuando se le quitaran los ruidos en su respiración que tanto se notaban en los micrófonos. La última tertulia que tuve con él fue el 30 de marzo de este año.Cada lunes, generalmente él en Madrid y yo en Euzkadi o en cualquier lugar del mundo, poníamos en cuestión la actualidad de la semana, desde nuestra esquina,  amablemente, sin acritud. Y a la gente le gustaba ese estilo amable de hacer política y de analizarla.A diferencia mía, llevaba los temas muy trabajados y con datos precisos. En eso era muy ortodoxo y no quería disentir de su partido y esas tertulias de la Ser le daban vidilla y le gustaban. Y en eso hemos estado cinco años con Isabel Cobo y Eva Domaika. Su pérdida por tanto la sentimos de manera especial. No era  ese político que unos pocos  daban por amortizado. Era un analista, un hombre histórico y un diputado que acudía a todas las comisiones y a todos los plenos religiosamente así como a todos los actos de su partido.Cuando yo iba a la SER en la Gran Vía de Madrid, tras las intervenciones radiales nos pegábamos nuestras grandes parrafadas en la puerta de este inmenso edificio mientras su escolta le esperaba. Creo que ha fallecido llevando escolta, cosa que le ayudaba en sus desplazamientos, cosa buena pues en los últimos años la enfermedad le había entorpecido sus movimientos.Todavía no hace mucho comentábamos la detención de la oposición al franquismo en la calle del Segre de Madrid, antes de la muerte de Franco, y de cómo los  llevaron a la Puerta del Sol a las celdas de la Dirección General de Seguridad. Allí estuvo con Ajuriaguerra, como también  formó parte en el Consejo General Vasco, en la negociación constitucional y estatutaria y en todas las salsas habidas y por haber para acabar con ETA. Desde el Pacto de Madrid al Pacto de Ajuria Enea. Y su obsesión era el acuerdo continuo entre el PNV y el PSE.Mi familia y la de Txiki se conocían desde Venezuela. No había verano, en los últimos años, donde mi ama con Doris Haddad, la madre de Benegas, no se vieran  y pasaran las horas  en los cafés donostiarras con  un grupo de amigas  que habían vivido en Venezuela .Y mi aita, que conoció al padre de Benegas  refugiado en Belloc y en Caracas me hablaba de aquellas aventuras del exilio de ambas familias. Y de como José María Benegas padre era el abogado defensor de los nacionalistas imputados bajo la República y de su trabajo con Aitzol.Con Txiki se va parte de la historia de Euzkadi.Un buen tipo, un político vocacional, un contemporáneo con el que íbamos a escribir a dos manos un libro sobre fotografías de la época.El PSE y el PSOE pierden a uno de sus referentes y Euzkadi a un servidor con el que mucho discutimos, pero que siempre fue leal al estatuto y a la amistad.Goian Bego.

0 comentarios