USTED ESTÁ ACREDITADO.Agur a Suárez aún llorando a Iñaki

MAUDILI PRIETO
Bilbo llora aún a Iñaki Azkuna (y de paso al Bilbao Basket) tras el funeral multitudinario en Santiago.No hay nadie que no alabe a Azkuna.Eso mismo ha pasado con Adolfo Suárez,que desapareció para siempre a los 81 años el 23 de marzo a las 15:03 horas en la clínica madrileña Cemtro.El primer presidente de la España que pudo votar,que pilotó la transición de las añejas bases del franquísmo y acabó su carrera política como presidente enfrentándose a los golpistas del 23F se ha ido sin su memoria por el Alzehéimer,tras 11 años de enfermedad.Suárez empezó como gobernador civil,pero pronto descubrió que desde RTVE podía hacer más que nadie aunque fuera un chusquero de la política o tremendo error,como le llamaron.UCD fue su creación y sus mejores amigos le acabaron hostiando hasta en el carnet de identidad.Luego,su aventura con el CDS,que acabó por hundirse y llevándole a los cánceres de su esposa,Amparo Illana,y su hija Marian.Pero fue en 2003,cuando el hijo Adolfo se presentó a las autonómicas castellanomanchegas cuando su puerta para todos se cerró para siempre.Todo el mundo,como con Azkuna,ha coincidido en sus alabanzas a quien mandó junto al rey español el cambio hacia la democracia española.Pero pretendo fijarme en Euskalherria.Se va con el régimen que
él fundamentó hundiéndose por todos los lados.Pero Adolfo Suárez tuvo una especial relación con la CAV y Nafarroa.Suárez,que se encontró con la etapa más activa de ETA,contribuyó a la pacificación calmando a los ánimos de unos militares exaltádos y que lo tildaron de traidor y es uno de los responsables de que, gracias al Estatuto de Gernika que él ayudó a alumbrar,la autonomía vasca sea un concepto sin igual en Europa,aunque nos falte ser libres.Es más,Arzalluz lo ha dicho:"El Estatuto se desarrolló más con Suárez que con cualquier otro presidente.A pesar del error sobre el idioma y la educación de la química nuclear,lo supo corregir con creces y a los hechos me remito". En 1980, Suárez adquirió tal conciencia de la necesidad de la autonomia vasca que desbloqueó el Concierto Económico para Bizkaia y Gipuzkoa (ya que Araba y Nafarroa,con Franco,lo conservaban a su manera) y el despliegue de la Ertzaintza, piezas claves de un Estatuto que,entre socialistas y populares,se ha incumplido y ha quedado envejecido prematuramente.Seguimos llorando a Iñaki -y de paso con un ojo puesto en Miribilla- en una Bilbo herida,pero cabe decir a Suárez también un agur.