Blogia
orain

NI,ZU TA BIOK.Desvario valón.

MAUDILI PRIETO.
Dicen muchas veces que el trazado lingüístico de la desgobernada Bélgica (estado que cuenta con rey,pero sin gobierno desde hace año y medio) es la que define la situación desestructurada de país.A menudo,el mapa de lenguas belga (Flandes,Valonia y Bruselas por medio) se compara con el mapa de Nafarroa (la zona vascófona,la zona mixta de Iruña y la zona no vascófona).Estas son las veleidades y delirios de UPN con los euskaldunes.Pero ahora hagamos un ejercicio de imaginación en Nafarroa para entender este artículo de hoy.Pongamos que a los compañeros del Diario de Navarra les da por decir que el Osasuna está con ETA porque hay ikurriñas y existe una peña llamada Indargorri.¿Se lo imaginan?.¿Verdad que no es posible que suceda esto?.Pues es verdad,no ha sucedido y esperemos que nunca pase,pero,en cambio,si ha pasado en la zona mixta de Bélgica,que es Bruselas.Y es que la desinformación del diario francófono belga Le Soir ha apuntado directamente al corazón y la filosofía del Athletic. En un artículo publicado el 27 de julio, y firmado por el periodista Olivier Mouton, redactor jefe de uno de los periódicos de mayor tirada y considerados de cabecera en Bélgica(si este es el de cabecera como serán los demás), se vincula al equipo rojiblanco con ETA.Ni Garzón en sus mejores tiempos lo habría hecho mejor.Pero no se queda corto el gabacho.Tílda a la política de cantera llevada a cabo en Lezama como "una práctica de discriminación étnica".El Athletic es el más perjudicado en esta colección de insultos que se llevan también clubes como el Barcelona o el Celtic de Glasgow.En una doble página dedicada a la dicotomía fútbol-política, Mouton recuerda cómo veía el fútbol cuando era pequeño y cómo lo ve ahora, cómo descubrió un mundo con nombres de equipos misteriosos, un deporte que todavía no se había convertido en un negocio y que sigue siendo, en lugares antaño afectados por la guerra fría, un instrumento político. Es en este contexto en el que aparece un pequeño texto bajo el título "Los nacionalismos europeos. Cuando el balón se convierte en arma identitaria"(artículo que,al finalizar este texto,daré reproducción íntegra).Mouton (periodista habitual en las crónicas políticas de un país que vive sin gobierno desde hace más de 400 días porque flamencos y francófonos no se ponen de acuerdo sobre cómo reformar el Estado) usa el Athletic que ahora gobierna Josu Urrutia y lo considera exponente de una "fiebre nacionalista que no deja de propagarse por Europa" para vincular a este deporte de masas con la política.Pero donde pisa fuerte el periodista,comparable a otros cuantos que conozco por Catalunya y más desvariado que los más conocidos de los medios de derecha madrileños,es cuando vincula a ETA con el Athletic al asegurar que el club es "la evocación deportiva de las veleidades independentistas vascas" y que mientras ETA sacude a la sociedad con actos terroristas y el cobro de un impuesto revolucionario, el Athletic de Bilbao apuesta por "una política de cantera".Mouton alaba dicha política, porque "supone promocionar y ayudar a las jóvenes promesas del fútbol vasco", pero que llega a tachar a renglón seguido de "discriminación étnica" porque "desde 1912 los jugadores del Athletic no pueden ser más que de origen vasco".Pero el plumilla belga no se queda con el club bilbaíno.Al Celtic de Glasgow o el Dundee United le vincula con el IRA.Al Barcelona, del que dice que "en cuanto puede ondea la senyera" (vamos,que el tio ha ejercido la lógica aplastante que Carod-Rovira no es más que un pobre desgraciado que mejoró una sede de la Generalitat en Bruselas para nada).Sin embargo,y salvo que Mouton reemprendra su serie,no habla del fútbol belga,un país desgobernado y enfrentado.
EL ARTÍCULO DE LA VERGÜENZA-----
Los nacionalismos europeos. Cuando el balón se convierte en un arma identitaria
OLIVIER MOUTON
Cuando yo era pequeño, los nombres de Goikoetxea, Guerrero, Zubizaretta (sic) o Etxeberria eran graciosas evocaciones lingüísticas de un estilo más bien duro y potente de jugadores del Athletic de Bilbao, temibles adversarios de los Belgas en la Copa de Europa. Se reían de los nombres porque eran difíciles de pronunciar. No evocaban todavía esta fiebre nacionalista que no cesa de propagarse por Europa.En la actualidad, el Athletic de Bilbao es sin duda la evocación deportiva de las veleidades independentistas vascas. Mientras que ETA sacudía regularmente los informativos con sus actos terroristas y su impuesto revolucionario, el Athletic seguía por su lado una política de cantera. En sí misma una opción loable: la voluntad de apoyar en primer lugar a las perlas procedentes del centro de formación. En realidad, una discriminación étnica: desde 1912, los jugadores del Athletic, un club que fue fundado por británicos, no pueden ser más que de origen vasco, una afiliación que debe remontarse a los abuelos.Sobre el mapamundi de los caprichos, el País Vasco se convertía entonces en una nación que atravesaba la frontera franco-española: a las provincias históricas de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa se le añadían la Navarra española, la Baja-Navarra, Zuberoa y Lapurdi. Un virulento manifiesto antiestatal.La inocencia de los caprichos del mapamundi ha dejado su lugar a la evocación estratégica de los tiras y aflojas intraeuropeos. A los Estados-nación amenazados por pueblos que afirman su identidad, su himno, su canto y sus colores. Barcelona, desde lo alto de sus maravillosas conquistas deportivas, ondea los colores de Cataluña. El Sporting Club de Bastia, cuyo escudo con la cabeza de un moro satisfacía a los enamorados de las aventuras romanescas, se unía a la reivindicación del FLNC-canal histórico. En Escocia, el Celtic de Glasgow o el Dundee United retrotraían a sus raíces católico-irlandesas y a las conquistas armadas del IRA. Más al Este, el Slovan Bratislava y el Sparta de Praga presagiaban en sus enfrentamientos deportivos la escisión de Checoslovaquia. Los del Estrella Roja de Belgrado y del Dinamo de Zagreb, una guerra civil sobre el suelo europeo. El balón identitario, desmesuradamente orgulloso de sí mismo, a la imagen de la consagración mundial de Italia bajo Mussolini en 1934.El fútbol es una alegoría que ha jugado en la historia europea. ¿Sabían ustedes que el AEK de Atenas surge de los refugiados griegos expulsados de Estambul, que se llamaba todavía Constantinopla, durante la guerra greco-turca de los años 1920? ¿Que el Olimpiacos de Nicosia es una formación chipriota cuyos aficionados militan por la anexión de su isla a Grecia? Más allá de la construcción europea, el fútbol destaca de qué manera el continente es un puzzle frágil.¿No decía el escritor Eduardo Galeano "el fútbol es el gran ausente de los libros de historia del siglo XX"? Como llave popular de la comprensión del mundo...

0 comentarios