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UN INSPECTOR DE LA GENERALITAT ENCARGÓ OBRAS EN UNA CASA EN TEIÀ A CUENTA DEL PALAU DE LA MÚSICA CATALANA

Nuevo golpe al nacionalismo catalán desde el caso Millet.Y es que,según informan los compañeros de "El Periódico de Catalunya",el caso del Palau de la Música ha dado un nuevo giro en su ya larga lista de golpes de efecto. Era conocido que el funcionario del cuerpo de interventores de la Generalitat Enric Fernández Ferrer –que entre el 2002 y el 2005 se encargó de fiscalizar las cuentas del Consorci del Palau de la Música–es la pareja sentimental de Gemma Montull, exdirectora financiera del Palau, imputada en la causa e hija de Jordi Montull, mano derecha de Fèlix Millet.Hasta ahí,una simple coincidencia. Pero ayer la Conselleria d’Economia i Finances informó de que Fernández pagó con fondos del Palau obras valoradas en 97.000 euros en una casa propiedad de él y de su pareja en Teià (Maresme),localidad conocida por haber aparecido en esta revista digital ante las informaciones que se han publicado y haber sido el lugar donde los protagonistas de las informaciones publicadas han actuado con más virulencia contra esta publicación.Coincidencia o no, la conselleria abrió un expediente disciplinario a Fernández, lo destituyó de sus funciones y entregó la documentación pertinente a las autoridades judiciales.De acuerdo con lo publicado,en la complicada arquitectura organizativa de la Fundació Palau de la Música-Orfeó Català, el Consorci es la entidad que recibe las aportaciones de dinero público de la Generalitat, el Ayuntamiento de Barcelona y el Ministerio de Cultura. Es por ese motivo que la fiscalización de sus cuentas depende la Conselleria d’Economia i Finances, en cuyo equipo de auditores encargados del Consorci Fernández trabajó entre el 2002 y el 2005. Fue mientras efectuaba ese trabajo cuando el auditor de la Generalitat y Gemma Montull se conocieron e iniciaron su relación.El noviazgo, evidentemente, quedó bajo los focos cuando salió a la luz pública, a finales de septiembre del pasado año, cuando la justicia ya investigaba el saqueo del Palau de la Música. Entonces, Fernández declaró que él no tenía nada que ver con el fraude orquestado por Fèlix Millet y Jordi Montull y que ya había dado las explicaciones pertinentes a sus superiores.Es más, el auditor argumentó que en su día había comunicado a la conselleria la relación que mantenía con Montull y que por ese motivo fue apartado del equipo de auditores del Consorci y destinado a otro grupo. Aún así, la conselleria abrió el pasado mes de octubre un expediente informativo interno sobre las actividades de Fernández.
En el transcurso de la investigación, según un comunicado emitido ayer por Economia, la Fundació del Palau informó el miércoles a la conselleria del hallazgo de las facturas de unas obras efectuadas en la casa de la pareja en Teià por valor de 97.000 euros y pagadas por la Fundació Orfeó Català. Según fuentes de la investigación, las facturas son recientes, de los últimos dos o tres años, cuando Fernández ya no estaba destinado a la fiscalización del Consorci.La hipoteca que pesa sobre la citada vivienda está a nombre de Montull en un 80% y de Fernández en el 20% restante, de acuerdo con las mismas fuentes.Gemma Montull es considerada por la investigación una pieza clave en el entramado que Millet y su padre organizaron en el Palau de la Música. Gemma Montull ha sido imputada por apropiación indebida y falsedad documental. También hay sospechas de que ella era la que manejaba la contabilidad oculta. Cuando los Mossos irrumpieron en el Palau el verano pasado, Montull fue descubierta intentando esconder un lápiz de memoria.Según un informe que los Mossos remitieron al juez Juli Solaz, Gemma Montull pagó con fondos del Palau diferentes reformas en la casa de Teià, como la instalación de tubos de riego en el jardín y de dos duchas termostáticas (estas, valoradas en 2.875,28 euros) y hasta una reforma de la barbacoa de la vivienda que costó 112,34 euros. En ese informe se detallaba que en las viviendas de Montull padre e hija en Teià se habían cargado al Palau 3.629,22 euros por tareas conjuntas de reparación del ascensor y de la caldera, el montaje de muebles Ikea y pintar el sótano.Lo que se debe tener claro es que el nacionalísmo catalán ha entrado en tela de juicio,porque Fernández comenzó a actuar durante el mandato de Convergència i Unió y el tripartito no supo pararlo a su debido tiempo,por el error de Maragall y sus socios,ERC e ICV (ahora enzarzados en no pactar de cara al futuro),de no destituir a los cargos de comandamiento convergentes.Y luego se pide a EA que no hable con el llamado "mundo radical"...

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